Laila Chemekh Saab: “Lo único que somos es tránsito”



En esta ocasión Sueños Postergados ofrece al lector una entrevista realizada a la talentosa fotógrafa venezolana de origen sirio, Laila Chemekh Saab, a propósito de su más reciente muestra fotográfica, titulada Creaciones Internas, expuesta desde el pasado 4 de junio en Liberarte, espacio alternativo ubicado en el Centro Comercial Los Chaguaramos, Local 16, PP, Caracas. Nacida en Cabimas, Edo. Zulia, esta joven artista fue galardonada en el 2009 con el Premio Nacional de Cultura, Mención Fotografía, por su exposición titulada Honor, Kalbhi, la cual se ha presentado en distintos países de Medio Oriente, Latinoamérica y Europa.

¿Cómo fue el proceso de elaboración de esta exposición titulada Creaciones Internas?

En el 2001 tenía una necesidad de crear un lenguaje simbólico partiendo de la luz. Pasé tres años trabajando la puesta en escena; paralelamente, fui formulando cada uno de los espacios donde podía integrar esa voz interna, mis pensamientos y sensaciones. Poco a poco, se fueron construyendo los espacios vivenciales de los personajes que forman parte de esta obra.

Te centras en el movimiento…



Exacto. El mero reflejo de la vida, el nacer, el crecer a pesar de que existen momentos donde los tonos grises a veces nos desvía o enriquece nuestra esencia; me propuse, en otras palabras, capturar el itinerario que cada uno de nosotros vivimos. En Creaciones Internas muestro un conjunto de imágenes que representa la naturaleza del ser. Lo único que somos es tránsito.

Nos gusta el fondo filosófico de estas 15 fotografías... ¿Cómo entiendes la unión entre los niños y las mariposas?

Parto de una línea imaginativa. El vuelo de la mariposa simboliza la vida y la muerte, un círculo de constantes hechos que van narrando el proceso, la evolución, la mudanza del ser hacia otras formas metafísicas, por llamarlo de alguna manera. En términos simbólicos, la mariposa ha sido objeto de innumerables interpretaciones a través de la historia. El hombre ha depositado en ella mitos mortíferos; pero también, dedicados al renacimiento de la vida. Entre la mariposa y el niño, veo una clara representación de esa transición vital; pero también, veo la naturaleza en pleno, la tierra, el agua, el aire, el fuego.

Cada encuadre tuyo es como una ventana al alma no sólo individual, sino colectiva… ¿Cómo logras eso desde la fotografía?


Te confieso, que no sé cómo logre capturar eso. Ese atributo es de cada uno de los protagonistas que posan ante la cámara: la niñez se baña de nobleza. Esa es la razón, por la cual, Creaciones internas se representa por sí sola, por cada mirada y serenidad que los niños entregan al momento de fijar la imagen.

La intuición es un factor importante en esta muestra...

Soy muy intuitiva en mi trabajo. Y tal vez de allí provenga ese significado trascendental y al mismo tiempo muy íntimo. Porque cada uno de esos instantes que allí vemos representa lo primigenio de nuestra especie a punto de despegar. La niñez, puntualmente. Lo que deseo es que las personas que vean las 15 fotografías logren llevarse la dulzura, la calma, la valentía, la esperanza. También deseo que piensen en el futuro. En la tierra que heredamos y que le dejaremos a nuestros hijos. Esta muestra reflexiona también sobre eso: sobre la naturaleza y el mañana.

CAM
2011

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